A medida que va pasando el tiempo no hemos podido dar cuenta que aquellos valores que fueron inculcados a nuestros abuelos, a nuestros padres se han ido perdiendo, esos valores que decían que todos somos iguales sin importar nuestra condición social. Ahora en este mundo capitalista, globalizado, los que poseen dinero son quienes tienen los privilegios.
El materialismo, el consumismo se han apoderado de la sociedad universal, por estos tiempos lo único importante para cada uno de nosotros es la ropa, los zapatos, la tecnología.
Estamos encerrados por un gran muro que gira entorna al dinero, a la necesidad de gastar en cosas innecesarias, somos indiferentes hemos a aquellos que necesitan de nuestra ayuda para sobrevivir.